lunes, 7 de julio de 2008

Larga distancia

Al leer el relato de Martín Caparros me sentí mas afianzada a mi postura de que nadie puede llegar a ponerse totalmente en el lugar del otro y sentir lo que el de al lado puede llegar a sentir. Cada uno es dueño y responsable de su propia historia.
Un viaje suele contener una historia paralela a la que vivimos en la vida cotidiana. Cuando uno viaje, ya sea por cualquier tipo de razón, significa otro cuento dentro de nuestra historia de vida, significa un relato distinto dentro de nuestro diario de escritor. Cuando uno viaja se sumerge en una vida desconocida, en una vida por conocer y quién sabe con qué se irá a encontrar y quién sabe el final de nuestra historia antes de comenzar a escribir el principio, quién sabe qué significado tendrá ese viaje cuando llegue su final. Cada uno posee su propio punto de vista o historia en su propio viaje.
La reflexión de un viaje, entonces, no podrá ser juzgada por el otro, ya que la experiencia se torna propia e individualista, el viajero lleva consigo un fragmento paralelo en su historia, un fragmento imposible de explicar, un fragmento imposible de entenderlo del todo, un fragmento que sólo el propio protagonista conocerá por siempre cada detalle.

Relato de Jorge Karamanukian

[Celia, mi tio me dio un fragmento de una revista armenia en donde cuenta brevemente la historia de su abuela Lusín. A continuación me comento algo que faltaba en el relato]

Cuando la abuela Lusín va a la plaza y ve colgados a los muertos, ella no se daba cuenta de lo que estaba pasando. Lo que sí recuerda es cuando su mama estaba cocinando y le dice a ella “nos llevan a todos a la plaza porque nos van a decir algo o nos van a llevar a algún lugar. Entonces ella recuerda como su mama dejo la comida calentándose arriba del bracero, porque no había gas. Cerraron la puerta y se fueron a la plaza, y nunca más los dejaron volver a la casa. Desde ahí los pudieron en caravanas a pie para llevarlos al desierto que era donde los mataban cuando pasan un par de días, su mama con ella logran escaparse de las filas de la caravana y ella si recuerda que durante muchas noches, porque durante el día los dejaban cobijar en las casas de los campesinos turcos, que no tenían problema con ellos y ella recuerda que como las casas del campo ahi en Turquía era abajo el establo y arriba la casa el campesino turco les daba un yogurt y un pedazo de pan árabe y los dejaban dormir entre las vacas entonces ella dormía con las vacas, con los caballos con las ovejas calentitos y a la noche se tenia que ir porque les decía los campesinos qe si venían los soldados turcos los ataban a ellos también, entonces les daba una taza de yogurt un pedazo de pan con eso se tenían que alimentar y después escapar por medio del campo hasta llegar a otro pueblo, a otra casa y escaparse mas hacia la capital de Turquía hacia el mediterráneo y ahí si la mama de mi abuela la tuvo que entregar a una familia para que la cuidaran pero como se enfermo y era tan débil mi abuela no servía para los servicios de la casa entonces la tuvieron ahí a un costado hasta que se curara y después se la devolvieron a mi bisabuela, pero Lusín no servía para servir a la casa de mucama e incluso mas como era una familia amiga no la entregaron al Harem de los Turcos, sino se hubiese quedado ahí hasta la muerte.
Como arreglaban los casamientos
Los muchachos de origen armenio que estaban en América mandaban la foto de ellos a Europa en donde estaban los otros familiares entonces los otros familiares iban y le decían, en este caso a la mama de mi abuela “mira este muchacho va a ser para tu hija”. Mi abuela vino con menos de 18 años, entonces no podía viajar y le fraguaron en Europa los documentos para que viajara en Europa con una edad superior a los 18 años entonces le agregaron mas edad. Cuando llega al puerto de Uruguay primero, en Montevideo, y de Montevideo llega a buenos aires en una barcaza. Y desde allí una familia conocida la tienen unos días y la llevan a esta familia donde estaba el muchacho que iba a ser su marido.
Como fue tu viaje a Armenia
Mira, yo estudie en mi casa, en mi familia me fueron contando sobre armenia, sobre la historia y todo lo relacionado con los armenios cuando entre al colegio primario e hice todo el colegio primario y secundario también me fueron mostrando todas las fotos y todo lo relacionado a la armenidad y sobretodo la lucha de tener una armenia independiente, libre, pero no existía porque la primera independencia fue en 1918 y a penas duro un año y medio o dos cuando el gobierno sobietico invade armenia y se apodera por lo tanto armenia queda sin independencia hasta 1991 donde armenia recupera por segunda vez su independencia y vuelve a ser independiente. Asique imaginate yo soy del año 1954 hasta 1991 vivi siempre soñando y pensando en una armenia independiente y la vi, la vi cosa que mis padres y mis abuelos no pudieron pero yo vi, sentí ,escuche, vi por la televisión como se independizaba armenia, la alegría que eso provoco en su pueblo y en toda la vida de armenia
¿Cómo fue mi primer viaje? Bueno, sencillamente, yo soy profesor del colegio secundario del San Gregorio del iluminador, los chicos como viaje de fin de curso cuando surge la independencia de armenia surge la posibilidad de ir y conocer armenia cosa que antes no se podía hacer tan libremente, los chicos del San Gregorio comienzan a viajar a armenia como viaje de fin de año apenas tres años de la independencia los chicos de quinto año me piden que es el deseo de ellos que yo los acompañe al viaje. Te imaginas el orgullo de que los chicos de quinto año me eligieran y la inmensa alegría de poder viajar a armenia que era lo que uno soñaba desde chico si bien no íbamos a ir al pueblo donde nacieron mis abuelos porque esa parte estaba tomada y sigue tomada hoy en día por Turquía, íbamos a conocer Armenia. Esto fue en el año 94, viajo con una delegación de casi 40 personas, yo iba como responsable de los chicos. Te imaginas la inmensa alegría cuando por primera vez el avión de la línea Armenia Airlines toca el aeropuerto de Yerevan en plena madrugada, tenemos que recordar que armenia en ese momento estaba sin luz, sin agua, sin gas pero a pesar de eso el pueblo hizo lo imposible para recibirnos con una inmensa alegría. A penas bajamos del avión fue una alegría inmensa, besar por primera vez esa tierra es imposible de describir, no hay palabras para describirla. Fueron 14 días de inmensa actividad, no solo por la actividad de tipo turístico que hicimos recorridos de museos, iglesias, montañas, las ciudades y fundamentalmente el conocimiento de la gente. Fuimos a la casa de gobierno, conocimos al presidente, tuvimos una charla con el vicepresidente estuvimos visitando el parlamento y los chicos que estaban viajando con nosotros de tan corta edad que ni se lo imaginaban estaban viendo toda una actividad republicana que había estado atada por el régimen soviético.
Te voy a contar una anécdota que vale la pena recalcar en esta situación. Nosotros estábamos hospedados en el Hotel Armenia en la plaza de la república que era atendido por el personal que ya venia de la época soviética, no estaban acostumbrados a recibir a turistas, a chicos jóvenes. Pero les habían dicho que venían un grupo de 40 personas que iban a alojarse allí y por lo tanto íbamos a ser todas las comidas allí, el desayuno, el almuerzo, la merienda y la cena en el hotel.
Na de las costumbres de armenia dado que es un país que tiene muchísima nieve y temperaturas muy bajas en el invierno en el desayuno se come comida, una comida muy abundante en grasas y en calorías porque la gente tiene que salir a la mañana con 17 grados bajo cero, y esa costumbre nos la trasladaron a nosotros en pleno verano y oh sorpresa un día a la mañana nos encontramos a la mañana con que el desayuno qe nos habían hecho, para ellos era un desayuno de reyes y yo que estaba colmado de estas costumbres armenias sabia de que se trataba y la anécdota es la siguiente : imagináte que no había luz, no habían medios de transito, no había gas para cocinar, no habían alimentos, porque estaban en guerra pero sin embargo nos consiguieron unos pollos que eran muy muy pequeños, consiguieron trigo y nos prepararon una comida típica que se llama Herisa, que es el trigo pisado con pollo desmenuzado a la mínima expresión casi hilos de pollo que brinda al que lo come unas calorías impresionantes. Lo impresionante de esto es que esas abuelitas que nos preparaban la comida se vinieron a las tres y media de la mañana caminando hasta el hotel porque esa comida lleva entre dos y tres horas de preparación y nos cocinaron para el desayuno esa comida típica. Y vos pensá, sin gas, sin colectivo, sin alimentos como hicieron para preparar semejante comida para nosotros? Fue algo que nos lleno de orgullo de emoción, esas mujeres cocinaron para nosotros y lloraban y nos abrazaban y decían que nosotros éramos como sus hijos como sus nietos que en ese momento estaban en el frente de batalla o sea chicos jóvenes de 18, 19, 20 y 21 años estaban en el frente de batalla y ellas nos estaban simbolizando que nosotros éramos sus nietos y nos estaban cocinando para nosotros.
[mi idea para el relato final es hacer un cuento en donde se veria una historia uno (la historia de Lusin y la masacre armenia) y una historia dos (el viaje de Jorge a armenia), me basaria en el texto que mi tio me dió sobre la historia de Lusin, el relato de jorge, Ararat (la pelicula), y una nueva pelicula que salio sobre la masacre armenia que se llama "la casa de las alondras"]

¿Por qué no bailan?

“Mesita de luz y pequeña lámpara a su lado de la cabecera, mesita de luz y pequeña lámpara al otro lado, el de ella. Su lado y el de ella”
Al principio del relato se puede imaginar una historia uno sobre un hombre viudo que vende todos sus muebles por algún motivo (uno puede interpretar que lo hace para mudarse a un sitio mas pequeño, o quizás para olvidar todo aquello que lo hacia pensar en su mujer).
Pero a lo largo del cuento comienzan a enredarse las cosas. Una pareja interesados en amueblar un pequeño apartamento comienzan a preguntarle al hombre el precio de las cosas. Pronto el hombre les ofrece whisky y es entonces donde el chico y la chica se ponen borrachos. Comienzan a ver gente dentro de la casa, gente que antes el relato no mostro ni insinuó, una historia dos con final abierto, con interpretación a modo de libre albedrio.

En el mar. Cuento de marineros. Antón Chejov

En el comienzo del relato se percibe un cuento de marineros, de la vida en sí de aquel que vive de las olas y del temporal, de aquel que padece los malos tiempos y disfruta del buen clima, de aquel que contempla más que nadie el cielo y siente más que cualquier otro el viento sobre su rostro. Es lo que sobre líneas se puede llegar a interpretar como un cuento simple, como la historia uno. Pero pronto esta impresión comienza a tornarse una simple introducción y es en ese momento que la historia dos entra en acción. Los agujeros en la pared se reflejan como la cerradura de una puerta en la que, por medio de ella podemos espiar y ser espectadores de una vida ajena. Es así lo que Chejov muestra en esta historia dos, la relación de la novia, el joven pastor y el ingles, alto y rollizo. Los gestos que se describen logran que nosotros, los lectores, nos centremos en el nudo de la historia, en la imaginación de aquellos gestos y la propia interpretación que tomamos de ella.